jueves, 8 de septiembre de 2016

Nueva etapa


Mi peque ya va al cole! Al cole de mayores porque ya es un león. Pasó por tortuga, patito, ardilla y ahora león. Cómo pasa el tiempo!

Suena "Pernicious" de All that remains


Una de las ventajas de mi trabajo es poder dedicar tiempo a mi peque para el periodo de adaptación, porque vaya periodo de adaptación. un rato hoy, otro rato mañana, otro rato el lunes, el martes algo más y el miércoles ya el día completo. Yo estaré aquí con ella hasta el martes. El miércoles me toca viajar. Pero al menos voy a estar con ella en estos primeros días, como ya hice con el pichurro. Ay! lo que duele el primer día. Lo preparas durante tiempo, sin insistir. En el momento de entrar le vas contando las cosas, entras (es un sitio nuevo y extraño para ella y hay mucho energúmeno al lado, ahora voy a eso) y claro, aunque vas explicando todo, el momento de partir se fastidia todo. Mi peque se quedó llorando. Sé que son unos días, pero nadie me quita el sentimiento al salir, de que, quizás podría hacer otra cosa... aunque sé que no puedo.

Suena "Big Springs" de Fleetwood Mac

Volvemos sobre los energúmenos. Porque haberlos, haylos... y menudos son. Son esos individuos (por cierto, aquí voy a pasar de especificar el género salvo en un caso en concreto, aplica por igual a padres y a madres) que avasallan al resto del mundo, que son totalmente ignorantes a todo lo que sucede a su alrededor y a lo que ellos no le dan importancia. Si te los encuentras en la cola del supermercado te dará diez veces con el carro, pondrá sus cosas encima de las tuyas y, claro, en ningún caso pedirá disculpas, ya que tu no existes en su esfera (mental, al menos, si es que tiene). Estos individuos gritarán por encima de los motores del avión aterrizando (aunque no haya avión, a ellos se la pela el avión), te empujarán a ti o a tu hijo, te meterá el culo en la cara para hacer lo que le apetezca, porque es solo él, o ella, y su hijo o hija.

Pues ahí me encontraba yo intentando explicar a mi peque que hay que hacer cola para entrar en clase, que se ponga detrás de otro niño cuando aparece el culo y el codo de un energúmeno que se me lleva por delante, casi tira al suelo a mi peque y... encima es de la otra fila (separada unos 3 metros, claro que para él 3 metros no son nada, él necesita 3 km para él solo). Bueno, tripas corazón, te separas y vuelves a lo tuyo. En mi caso a seguir con mi peque y que su entrada sea lo mejor posible. Dejamos la mochila, cogemos el vaso y... blam! una mujer (mayor, vieja, abuela, despectivo o sin ello) me lleva por delante y me tira al suelo (disculpas? pa' qué?!). Entro en la clase, "lleva el vaso a la mesa", "dejamos ésto aquí", "¿quieres jugar con las piezas, con las pinturas?"... se acerca el trauma. Al principio todo va bien, a pesar de los energúmenos. Pero en ese momento llega el elefante supremo. Me empuja, se pone delante de mi hija, acapara todo el espacio en kilómetros a la redonda. Al final me tengo que despedir de forma abrupta, no me deja salir y mi peque empieza a llorar. Todavía cuando paso a su lado intentando hacerme hueco (ya está llorando, ya no va a mejorar nada) me mira con mala cara... tendría que haber usado los codos como Redondo para hacerme el hueco!

Suena "Stockholm Syndrom" de Muse


Al final, como he dicho, serán unos días. No lo recordará aunque yo si, es lo que tiene. Al menos estoy aquí. Por los otros días que no puedo.