Pues si, tras una buena paella, había que dar un paseo para bajar el arroz (como dice J, que nos iba a "eclatar" en la tripa) cuando nos sorprendió esta entrada de una casa...
(obviemos la mala dicción del dueño del "timbre" o el daltonismo, quién sabe)
Al menos viene con instrucciones, aunque para mi que falta la señal de advertencia correspondiente para evitar llamadas "indeseadas" ;)