Los almendros ya tuvieron sus flores, y se cayeron. Ahora esperamos tener buenas almendras, al menos del árbol grande. La primavera ha llegado y las lluvias de este año están siendo excepcionales, y muy buenas (hace falta y, para mi en particular, es un placer ver llover, y el agua... quizás por mis años en Sevilla). Los manzanos están sacando sus primeros brotes y ya se ven despuntar las flores; las parras están plagadas de yemas (todavía no se como sacar un sarmiento para mi padre, a investigar); los granados ya tienen las puntas rojas por todos lados y las higueras tienen las puntas de las ramas a punto de abrir. Los rosales y el jazmín están plagados de brotes nuevos, y teniendo en cuenta lo que sufrieron el año pasado con la obra en el jardín, es una alegría muy grande.
Pues eso, los cerezos también están en flor. Estas son las primeras flores en brotar. Tenemos las ramas que están bien hasta arriba de brotes nuevos, de capullos de flor a punto, pero también perdemos bastantes ramas cada año, se secan. Otro punto pendiente en mi lista de tareas.
