viernes, 26 de abril de 2013

de vuelta


No se cuantas veces he usado un título parecido, ni cuantas más vendrán. Parece que por ahora va a ser una forma de vida. De camino a, reuniones, más reuniones, vuelta. Una rueda que no para. También es cierto que espero que el ritmo y sucesión de viajes se reduzca, aunque solo sea por mi salud estomacal (y por no malacostumbrar a mi cintura ;D )

Hoy he rozado el límite de ajuste sobre el embarque. El vuelo salía a las 16:50. Gran atasco en la E4, a mitad de la salida a la autopista cambio de rumbo, le pido a la taxista que me lleve a T-Centralen, a la estación del Arlanda Express... son 20 minutos garantizados. El atasco está por todos lados, tardamos media hora en llegar a la terminal de Arlanda Express. Por 30 segundos llego a montarme en el tren de las 16:00, comprando el billete antes (en el tren te cuesta un 20% más). Llego a Arlanda, me subo las escaleras mecánicas de 3 en 3 y voy corriendo al control de seguridad pero... Jodor! hay una cola de las gordas (no hay fiesta, así que no lo acabo de entender). Después de comprobar que la cosa no va a mejorar (en 5 min solo he avanzado 2 metros y me quedan muchos muchos más) me paso a la cola de control preferente (no voy en Business ni tengo tarjeta oro de millas, pero me quedan 20 minutos para embarcar). Me dejan pasar, control de seguridad eficiente y camino de la puerta... no podía ser fácil al final... puerta A9, no es la peor pero hay un trecho. Según entro en la zona de tiendas (el control de seguridad desemboca directamente el el Duty Free, vivan las tentaciones!) se anuncia por megafonía el "last call for passengers travelling to..."... mi vuelo, última carrera!! Soy el penúltimo en embarcar.

Ahora, recupero el aliento mientras suena


y pienso en mi Chule y el tiempo que no estoy. Pienso en mi Chule y en mi peque. Espero que ésto que hago sea correcto y que nos venga bien a todos. En cualquier caso, no va a ser para siempre. El pico tiene fecha límite. Las vacaciones de Junio, tras Midsommar.

Estos vuelos encadenados dan para tres cosas. Cada vez más común que tenga que sacar trabajo pendiente, o preparar slides para la siguiente reunión o revisar trabajo. Así que estos tiempos "muertos" sirven, se vuelven útiles. La otra cosa que dan es para leer, 1Q84 es lo que tengo encima de la mesa (bueno, en el iPad) pero la lista de libros detrás es larga (y más, y más). Pero, a veces, da para divagar, y escribir entradas de blog :)

Suena


I stand alone and breathe again
I won't stop until this is through

y reviso (mentalmente) un correo que he recibido. Nuevas oportunidades? Hace tiempo que no hablaba de las opciones de quedarme en mi empresa o emprender nuevos caminos. Ya me había hecho a la idea de seguir aquí y parecía que las cosas se movían (salvo un dichoso papeleo burocrático que hace que lleve 6 meses en un limbo, dentro de una organización ficticia, que no es nada agradable). Sin embargo, la situación de indefinición no se arregla y no es malo oír que se mueve fuera. Bueno, pues los que me abrieron una puerta y me ofrecieron una oportunidad hace ya varios meses han vuelto a llamarme. Me ofrecen la misma posición casi un año después ("no hemos logrado cubrir la plaza"). Bueno... ya veremos.

Vuelvo a la lectura. Suena


mientras Aomame llora en silencio, los acordes de inicio, la flauta...


mientras Tengo recuerda a Aomame y cómo le cogió la mano...

PS, Es singular (no encuentro otra palabra mejor) pero es una de las ventajas del iPad. Esta entrada la voy escribiendo mientras vuelo, saltando de la APP de iBooks a Blogger para ir añadiendo elementos.