Es un decir... En el fondo ha sido bueno para nuestro cerebro. Hemos desconectado, no hemos leído el correo del trabajo y no hemos hablado de las mierdas diarias de este curro nuestro. Pero no ha sido un viaje del todo placentero.
Para empezar, hemos tenido que ingresar a mi madre -no es algo que nos pille desprevenidos-, ("osteoporosis avanzada") y todo ello, cayendo chuzos de punta. Así que el inicio no ha sido bueno. Las primeras informaciones de la clínica son positivas.
Al menos nos hemos podido escapar los días de diario a Sancti Petri. Aunque no ha dejado de llover, nos ha dado para dar paseos y que el pichurro disfrute.
Bajada a la playa |
el entorno I |
el entorno II |
La playa I |
La playa II |
Medina Sidonia, una subida desde el lado fácil ;) |
Medina Sidonia, las nubes amenazantes rompieron a llover |
Testigo de nuestro paso :) |
Además, hemos visto a nuestros amigos. Esto también compensa.
De vuelta a Sevilla nos hemos pasado el resto de la semana de visita en la clínica... de buen comer, de ver llover y llorar a la gente por la cancelación de las procesiones, y bueno, alguna que otra comprita de mi chule.
Sevilla y el Guadalquivir |
Sillas preparadas para una parada que no fue ...empezó a llover por la noche |
Aunque algo raras, no han sido malas vacaciones. Extrañas, ajetreadas, con poco tiempo para descansar pero hemos desconectado bien.
Y el colmo de todo este viaje, 150km de retenciones en acordeón para volver a casa... la N-V iba muuuuy mal. Pero bueno, aun tenemos un día libre antes de volver al curro.