lunes, 8 de octubre de 2018

De nuevo en camino


Y que conste, que no es por ganas. Pero me parece que de aquí a final de año vuelve a ser una temporada movida.

Suena “S.O.S.” De Apocalyptica


Empezamos con una parada técnica de 10 horas en Frankfurt, para una reunión. Cosas rocambolescas de la vida, es el punto equidistante de las tres personas que nos tenemos que juntar así que hemos decidido hacer el viaje. Si lo piensas fríamente, el coste del billete de avión es bajo, unos 200€ (en mi caso nada, porque ya iba a Estocolmo), no hay noche de hotel porque se puede hacer en el día, los costes en dietas son básicos (o inexistentes). Total, que sin que se haya inventado el teletransporte (que no, que no se va a inventar, pero molaría moverse como en Hyperion), allá vamos a la forma más eficiente de reunirnos.

Por cierto, que puestos a inventar, en vez del teletransporte (que ya digo que molaría) deberíamos hacer un esfuerzo razonable para hacer transportes más rápidos y eficientes. Yo creo que, en este mundo globalizado, resulta más y más común trabajar en equipos de diferentes procedencias (que, además, enriquecen las capacidades de esos equipos). Pero es que, dada la naturaleza humana, sigue siendo necesario el contacto personal, cara a cara, para poder desarrollar mejor el trabajo. Si, las reuniones vía Skype, WebEx, Hangouts o similar son buenas, de hecho, creo que son la mejor forma de tener reuniones “seminario” donde una o dos personas hablan sobre una materia y el resto (a veces, una audiencia grande) recibe la información. Pero para interactuar de forma dinámica, donde el lenguaje no verbal es tan importante o más que lo que se dice, sigue siendo necesario estar en la misma habitación. Porque las herramientas de colaboración mencionadas antes requieren de elementos adicionales para ser efectivas, necesitas una cámara que capte a la persona o personas en la reunión, necesitas pantallas donde efectivamente puedas mostrar todo, pero también necesitas pizarras electrónicas dónde poder escribir, dibujar y compartir en tiempo real, necesitas que, además, la interacción sea multidireccional para que todos puedan intervenir, pero también requiere de nuevas formas de trabajar, nuevos protocolos de relación que compensen la falta de interacción directa. Eso requiere tiempo (seguro que mis hijos tienen esa interacción más natural). Y para eso necesitamos hacer más eficiente (y rápidos) los transportes, hasta que llegue ese tiempo.

Suena “...To be loved” de Papa Roach


Mientras esperamos a que la tecnología avance, allá vamos a otro viaje de reuniones y más reuniones. Al menos parece que no hace muy mal tiempo en Estocolmo.

Suena “The future is dark” de Moonspell


PS, lo de mi padre no fue para tanto 😅