No, no ha sido un buen finde. Empezamos el viernes, que el finde ha sido largo. Aunque la semana venía de largo. Tres días, dos noches en París de reuniones con cliente. Agotado el jueves, el viernes me voy al pueblo.
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| Upgrade con vistas |
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| Moules frites |
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| Panthéon... por que seá? 😂 |
Pues eso, el viernes me voy al pueblo a acompañar a mi padre. Han instalado la lápida de mi madre. Por si necesito explicarlo a alguien, odio las lapidas, cementerios e iconografía similar. No me gusta tener un lugar de peregrinaje relacionado con los muertos. Entiendo que nuestra conciencia humana como individuo y sociedad lleva asociada una comprensión del individuo y una necesidad de rendir homenajes. Entiendo la evolución sociológica de los últimos miles de años, pero... no para mi. Hay culturas donde los muertos, espíritus, ancestros, etc... se recuerdan de otra forma, sin necesidad de lugares de peregrinaje.
Aún así, toca ir. Voy, acompaño, estoy con mi padre, veo a la familia con la que guardo algo de relación, comemos en el mil veces nombrado Hostal Perú y vamos a ver a la familia de mi padre (en ese lado son aún menos). Me tomo un café con mi Guadiana personal. Es a veces frustrante ver como se encierra cada vez más en sí misma, lamiendo sus heridas, dejando menos resquicios para el resto. Volverá a desaparecer por una larga temporada. Yo seguiré escribiendo y llamando de vez en cuando, pero cada vez veo menos opciones. Quién sabe...
El sábado nos vamos a Segovia. Tenemos noche en el parador. El plan suena bien. Piscina, cena, desayuno, piscina, comida y vuelta a casa. Llegamos al parador y no tienen nuestra reserva. La central de reservas se equivocó de fecha y reservaron para el viernes. El parador está lleno, no hay sitio. Además nos cobraron la noche anterior por no presentarnos. La Granja también está completo. No hay nada. Buscando alternativas reservamos en Ávila. Pero el plan de piscina está arruinado. Después del estrés de estas semanas esto es la puntilla, la gota que colma el vaso. En vez de ser un finde para tomar fuerzas es un finde que nos vacía aún más.
En la parte de Paradores, y la antención recibida destacar varias cosas. El Parador de Segovia nos dejó usar la piscina con los peques por lo que para ellos fue todavia finde de piscina (aunque para nosotros no quedó mucha energía). Además, ellos gestionaron la reserva en Ávila. La central de reservas tomó la iniciativa directamente de investigar la llamada realizada y, tras admitir el error, nos devolvieron el dinero cargado por la noche no pasada en Segovia... pero nada de compensación (en otras culturas y seguramente en otras cadenas de hoteles, ante una queja semejante, no solo te habrían devuelto el dinero, te habrían compensado, vía bono o similar, por el error cometido). Simplemente una devolución del dinero, ni siquiera una disculpa. No se...
El domingo de vuelta a casa los nervios explotan. Acabamos discutiendo todos con todos en casa. Es uno de esos findes que deberían haber acabado el sábado y saltar directamente al lunes 😒
Aún así, toca ir. Voy, acompaño, estoy con mi padre, veo a la familia con la que guardo algo de relación, comemos en el mil veces nombrado Hostal Perú y vamos a ver a la familia de mi padre (en ese lado son aún menos). Me tomo un café con mi Guadiana personal. Es a veces frustrante ver como se encierra cada vez más en sí misma, lamiendo sus heridas, dejando menos resquicios para el resto. Volverá a desaparecer por una larga temporada. Yo seguiré escribiendo y llamando de vez en cuando, pero cada vez veo menos opciones. Quién sabe...
El sábado nos vamos a Segovia. Tenemos noche en el parador. El plan suena bien. Piscina, cena, desayuno, piscina, comida y vuelta a casa. Llegamos al parador y no tienen nuestra reserva. La central de reservas se equivocó de fecha y reservaron para el viernes. El parador está lleno, no hay sitio. Además nos cobraron la noche anterior por no presentarnos. La Granja también está completo. No hay nada. Buscando alternativas reservamos en Ávila. Pero el plan de piscina está arruinado. Después del estrés de estas semanas esto es la puntilla, la gota que colma el vaso. En vez de ser un finde para tomar fuerzas es un finde que nos vacía aún más.
En la parte de Paradores, y la antención recibida destacar varias cosas. El Parador de Segovia nos dejó usar la piscina con los peques por lo que para ellos fue todavia finde de piscina (aunque para nosotros no quedó mucha energía). Además, ellos gestionaron la reserva en Ávila. La central de reservas tomó la iniciativa directamente de investigar la llamada realizada y, tras admitir el error, nos devolvieron el dinero cargado por la noche no pasada en Segovia... pero nada de compensación (en otras culturas y seguramente en otras cadenas de hoteles, ante una queja semejante, no solo te habrían devuelto el dinero, te habrían compensado, vía bono o similar, por el error cometido). Simplemente una devolución del dinero, ni siquiera una disculpa. No se...
El domingo de vuelta a casa los nervios explotan. Acabamos discutiendo todos con todos en casa. Es uno de esos findes que deberían haber acabado el sábado y saltar directamente al lunes 😒
